CENTRO PARROQUIAL

“Unidos hacemos historia”

El centro parroquial en tiempo de ser reconocido como parroquia política y eclesiástica se denominó la zona la Latig, por ser una zona donde abundaba esta planta nativa y que la gente que pastaba sus ovejas arrancaba esta planta para realizar tejidos ya que la planta era muy similar a la totora para tejer adornos. Despues de 1907 con el reconocimiento como parroquia eclesiástica se transforma en el centro de la parroquia.

Don Julio César Nivelo de 94 años de edad, es uno de los personajes icónicos de la Parroquia Santa Ana, por ser el hormador de sombreros más antiguo, su gran labor de servicio y dedicación a la iglesia parroquial desde los 12 años de edad, apoyando en las funciones de la iglesia y después como síndico hasta el año 2018.

Su esposa se llama Leopoldina de Jesús Guamán Orellana, con quien ha formado su hogar, siendo padres de 7 hijos (4 hombres y 3 mujeres). Se dedicaba a la crianza de ganado, labores agrícolas, peluquero, hasta los 50 años de edad al hormado de sombreros de paja toquilla y paño; además, un dato curioso es que por habilidad realizaba actividades no muy comunes, tales como autopsias a los cadáveres y castración de animales.

Su dedicación y vocación de trabajo comunitario, lo ha llevado a ser muy apreciado y conocido no solo en la parroquia Santa Ana, sino también en las parroquias vecinas.

El amor por ver surgir a su tierra, le permitió desde muy joven involucrarse en todos los trabajos que fomentaban el desarrollo social y comunitario. Fue uno de los precursores en la construcción de la iglesia matriz hoy declarada Patrimonio Cultural, gestor de mingas, entre otras funciones.

Por su avanzada edad y las enfermedades, no puede hacer mayores actividades, pero sin duda alguna, la huella que ha sembrado y los aportes que ha realizado son valorados y reconocidos por aquellos que lo conocen. Su legado sigue vivo en todo aquel que comenta de Don Julio César Nivelo.